La ‘Falla Immaterial’… es material
Este año tenemos la Falla Immaterial más contradictoria porque es material, o sea que se puede tocar: son piezas que se pueden manipular para construir su València deseada.
Este año tenemos la Falla Immaterial más contradictoria porque es material, o sea que se puede tocar: son piezas que se pueden manipular para construir su València deseada.
Los falleros (y sobre todo las fallas) saben que la falla les cuesta un pico, pero ¿cuánto en total? La Universitat de València ya se ha puesto las pilas para calcular el impacto económico de las Fallas de València 2023. Y tú quizás puedas ayudar.
El proyecto de Falla Immaterial de este año trae la primera mascletà “indoor” (o sea, en un espacio interior) de la historia, pero tranquilidad que será menos peligrosa que una caja de bombetas.
Joan Fuster tenía de antifallero lo que de monja: simplemente no le gustaba la fiesta controlada por el poder de su época, la quería popular. Es una de las principales ideas que dio Jesús Peris en su conferencia “Fuster i les Falles” celebrada ayer en el Centre Cultural La Nau.
La imagen gráfica de las comisiones falleras y de la fiesta en general es importante y debe ser plural como lo es el colectivo que las forma, según indicaron los ponentes de la segunda jornada de “Les Falles a La Nau”.
La “comisión” de la falla inmaterial cumple cinco años, y por ese motivo se ha publicado un llibret de la misma que se puede coger y hasta sobar, porque está en el mundo real.
El patrimonio oculto valenciano será el tema de una charla por Internet que tendrá lugar esta tarde, y aunque por el título parece tema de Iker Jiménez, la impartirá el periodista especializado en fiestas Quique Collado. ¡Apúntate, es gratis!