¡Qué os voy a contar de la mascletà! Es una especialidad pirotécnica que es como la tortilla con cebolla: o la odias a muerte, o la adoras. Para los que no lo sepan, una mascletà es una serie de fuertes explosivos (conocidos como masclets, de ahí su nombre) con cierta potencia que se disparan continuamente con la finalidad básica de producir ruido (no luces), pero no de cualquier manera, sino con ritmo. De hecho, la mascletà se dispara casi siempre de día aunque cada vez tienen más efectos de colores; los colorines cobran más importancia cuando es nocturna (también llamada “mascletà de colores”), que se ven mejor, claro. El disparo empieza despacito y va aumentando gradualmente de sonoridad, hasta llegar a lo que se conoce como “terremoto”, que es la parte final, donde explotan a la vez montones de fuertes petardos provocando un ruido ensordecedor. Después se disparan unas carcasas al aire, también muy potentes, que finalizan la mascletà. Todo dura unos diez minutos, pero ¡qué diez minutos! A algunos, sobre todo los que no están acostumbrados, les saca los sudores, y a los apasionados, hasta las lágrimas.
Una mascletà es muy, muy ruidosa, como podéis suponer. Pero a los valencianos nos encanta, y más nos gusta cuanto más ruido hace. ¿Estamos locos? Quién sabe. Si un día cayera una bomba nuclear en la plaza del Ayuntamiento de València al final de la mascletà, la gente seguro que aplaudiría a rabiar, si es que queda alguien. El caso es que del 1 al 19 de marzo, esta plaza se llena de gente desde antes de las 13.30 para ver la mascletà de las dos. Y los fines de semana y en Fallas, no hay quien se pueda mover en la plaza de la gente que hay. A las dos menos cinco o incluso antes, la gente ya empieza a silbar porque desea que empiece cuanto antes (si se retrasa la mascletà, el público es capaz de cualquier cosa).Y cuando acaba, la gente aplaude a rabiar, si ha sido buena la mascletà (es decir, si ha tenido ritmo y ha sido fuerte), muchos van a buscar al pirotécnico para subirlo a hombros, cosa que ocurre casi siempre.
Todo eso ocurre en la plaza del Ayuntamiento de València; en las mascletaes de las comisiones falleras que se disparan en toda la ciudad, no existe tal aglomeración, pero aunque son más pequeñas, tienen la ventaja de que es más fácil verlas y acercarse a ella, y que cuando acaba una, empieza la de la comisión vecina. Así, te puedes tirar hasta más de las dos y media viendo mascletaes.
Unos consejos por si vas a la mascletà del Ayuntamiento de Valencia: si es la primera vez, ponte por la zona de la fuente, ya que ahí empieza y se nota menos el ruido del final. Pero si quieres vivirla a tope porque ya has visto otras o porque eres muy valiente, ponte cerca del edificio de Correos o de Telefónica para tener cerca el final. ¡Verás como vibras! (y no en sentido figurado, ya que tu cuerpo vibrará de las explosiones).
Recomendaciones para ver una mascletà
- Si el ruido te parece muy fuerte, ¡no te tapes los oídos, que es peor! Mejor que abras la boca un poco.
- Como te pongas demasiado cerca, aparte de oir más fuerte la mascletà, cuando acabe estarás lleno de papelitos de colores provenientes de los petardos que explotan.
- Respeta las medidas de seguridad por muy pequeño que sea el disparo, porque un masclet que salte y explote al lado puede ocasionarte graves quemaduras.
- Antes de situarte para ver una mascletà, controla la dirección del viento para evitar que el humo del disparo vaya hacia ti. ¡Si te pega en la cara, no verás nada!
Por si no has visto nunca una, aquí tienes estos vídeos:
Hay más vídeos de espectáculos pirotécnicos en el canal de YouTube de Distrito Fallas.
¿Cuándo se puede ver una mascletà?
Del 1 al 19 de marzo en la Plaza del Ayuntamiento de València
Del 16 al 19 de marzo en bastantes calles de València
Hora habitual: 14.00 h (confirmar en los programas de festejos)
PARA SABER MÁS:
“¿En qué consiste la mascletà“, web de ARS Pirotecnia (consulta: 12/02/2021).
“La historia y el verdadero origen de la Mascletà de Valencia“, web Valenciabonita.es (consulta: 12/02/2021).