Marina García Arribas, fallera mayor infantil de València, también tuvo su exaltación como está mandado, en cuyo espectáculo hubo mucha fantasía.
Y tras la Exaltación de la Fallera Mayor de València del viernes por la noche, fue el turno ayer por la tarde del acto correspondiente a la Fallera Mayor Infantil de València. El traje elegido para la ocasión por la protagonista tenía el color gris imperial, el cual como es tradicional, se descubrió poco antes de empezar el acto.
Tras la llegada al Palau de la Música de Marina, su corte de honor y las personalidades políticas a partir de las 16.40 horas, el espectáculo comenzó sobre las 17.30. Una representación en valenciano que con el título Fantasía que realizó JM Gestión Teatral en la que los dos protagonistas, Sara y Tomás, recuerdan su niñez y algunos juegos con los que se divertían en su juventud. Durante el espectáculo se lanzó el mensaje de que los sueños pueden hacerse realidad, ya que los grandes cambios empiezan por grandes sueños. Entre dichos sueños estaba que la ciudad fuera sostenible y contara con biodiversidad, en línea de la Capital Verde Europea que es ahora València.
Tras el descanso, sobre las 18.30 empezó el acto protocolario en el cual la alcaldesa de València, María José Catalá, le impuso la banda a Marina, y el concejal de Fallas, Santiago Ballester, hizo lo mismo con la corte de honor infantil.
La mantenedora del acto, Hortensia Roig, comentó en su intervención que las Fallas son también formación, en el sentido de que proporcionan valores que sirven de mucho en la vida: generosidad, compartir, valorar y aplicar la cultura del esfuerzo. Además también suponen respeto y devoción, mano izquierda y familia, sin olvidar que también son Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Tras acabar el acto, junto al Palau de la Música se disparó un castillo de fuegos artificiales a cargo de Pirotecnia Crespo.