Los cien años de la Falla Conde de Salvatierra-Cirilo Amorós ya tienen su crónica en papel (aunque con algún año de retraso por culpa de algún que otro virus y otras razones), codirigida por el incombustible historiador Javier Mozas.
Ha costado cinco años de trabajo, pero al final ha llegado. El viernes pasado se presentó al público el libro que conmemora el centenario de la Falla Conde de Salvatierra-Cirilo Amorós, haciendo un repaso de lo más importante de esta comisión fallera que planta sus fallas junto al valenciano Mercado de Colón. Es el resultado de un enorme trabajo realizado por miembros de la comisión, que han buscado crónicas y fotografías en archivos públicos y personales.
Más de 150 falleros y falleras asistieron a la presentación de la obra en el casal de la comisión, explicada por sus directores Marisa Martínez y Javier Mozas. Este último contó la anécdota de que cuando la falla fue a pedir su colaboración pensaban que la primera falla había sido del año 1921, pero él les demostró que ya había habido una en 1916 mostrándoles el llibret de la misma. Por tanto, el centenario realmente se cumplió en 2016.
El libro está estructurado en cuatro bloques, cada uno introducido por la letra de una canción relacionada con la comisión fallera. El primero se dedica al contexto urbano y fallero, contando la historia del barrio, del mercado y de comisiones falleras desaparecidas de la zona, y analizando el precedente de la falla plantada en 1916 cerca del aún no inaugurado Mercado de Colón. El segundo repasa la historia de la comisión de 1921 a 2021 en forma de fichas anuales que recogen los acontecimientos más importantes del año en la falla y en la sociedad, así como fotos de las falleras mayores y de los catafalcos plantados. El tercer bloque se dedica a la celebración del aniversario, explicando el logotipo, la portada y la contraportada (obras de Juan José Belda y Pilar Roger), los actos de celebración de la efeméride y mostrando las fotos de los presidentes adultos e infantiles que ha tenido la comisión. Por último, el cuarto apartado tiene el título “Destaquem per…” y recuerda las falleras mayores de València (Elisa Antolí-Candela, Carla Muñoz y Lola Flor) y componentes de cortes de honor que han sido falleras de la comisión, así como los casales, las cruces de mayo, el grupo de teatro, tres revistas que publicó la comisión (Brusquina, El Mercat y El Correfocs), las presentaciones y las primeras semanas culturales.
La presentación del libro incluyó un vídeo con imágenes de la falla plantada en 1931, que se llevó el primer premio de la única sección que existía en ese momento. A colación del mismo habló el nieto de uno de los falleros de ese año, que regaló una copia del estandarte que acredita ese primer puesto, ya que el original se perdió.
El presidente de la comisión, Vicente Fuster, calificó el acto como uno de los más emocionantes del ejercicio, y más cuando forma parte de una de las familias que han permanecido desde siempre en la misma.
La presentación del libro forma parte lógicamente de la celebración del centenario, la cual continuó el fin de semana con una Ofrenda a la Virgen de los Desamparados y una dansà a cargo de numerosos miembros de la comisión.
