En la Gala de la Solidaridad celebrada ayer, la Falla Alberic-Heroi Romeu se llevó el premio al mejor proyecto de primera participación por una iniciativa de visibilidad, divulgación y recaudación de fondos a favor del síndrome de Noonan, y la Falla Carrera Malilla-Isla Cabrera, a su proyecto dedicado al cáncer como el mejor de este año.
Seis comisiones falleras han sido las protagonistas en la XVII Gala de la Solidaridad Fallera celebrada ayer viernes, destacándose proyectos sociales, humanitarios y de accesibilidad para personas discapacitadas.
El acto se celebró en el auditorio Cubo Azul de la Universitat Politècnica de València, organizado por la delegación de Solidaridad e Inclusión de Junta Central Fallera (JCF) y que contó con la presencia de diversos concejales del Ayuntamiento de València y las falleras mayores de València, Nerea López Maestre y Carmen Martín Carbonell, sus cortes de honor y el concejal de Cultura Festiva, Carlos Galiana.
Se entregaron seis premios, cinco a los proyectos más valorados por el jurado de los que se presentaron y uno al mejor proyecto de primera participación. Excepcionalmente, este año se amplió el período de desarrollo de la acción solidaria porque las medidas sanitarias contra la pandemia interrumpieron muchos proyectos, los cuales terminaron el pasado marzo.
Este año se han presentado 13 proyectos a los premios. La Falla Plaza de Pilar recaudó fondos a favor de la Fundación Pequeño Deseo y su ninot indultat se relacionó con ella. La Falla Parc Sant Roc de Silla publicó un llibret que daba visibilidad al Alzheimer. La Falla Carrera de Malilla-Isla Cabrera eligió a los afectados del cáncer para hacerlos más visibles, siendo incluso esta enfermedad la protagonista de su falla.
La Falla San Vicente de Aldaia ha impulsado una recogida de alimentos no perecederos para persosas con pocos recursos. La comisión de Alberic-Heroi Romeu puso en marcha el proyecto “Fallas Limoneras” para divulgar y recaudar fondos para afectados por el síndrome de Noonan. La Falla L’Eliana-Cid ha conseguido dinero para la rehabilitación de las plantas de oncología pediátrica del Hospital La Fe de València y convertirlas en “estaciones lunares”.
La comisión de Mariano Benlliure-Acequia de Tormos ha sensibilizado, dado visibilidad y promovido la inclusión social de las personas con parálisis cerebral infantil, además de recaudar fondos para la causa. La Falla Costa y Borrás-Agustina de Aragón ha recogido alimentos y juguetes en Navidad para personas necesitadas. La Falla Barrio de San Isidro ha destacado las enfermedades raras para aprender a convivir con ellas y ayudar a su entorno más desfavorecido y vulnerable.
La Falla Sagunto-Padre Urbano ha desarrollado acciones solidarias para cumplir los sueños y pequeños deseos de muchos niños y niñas, porque está demostrado científicamente que ello les ayuda a mejorar en sus enfermedades. La Falla Huerto de Santo Valero-Avenida de la Plata ha recogido medicamentos, alimentos y diferente equipación con destino a Ucrania. La Falla Port de Silla realizó una jornada de inclusión para su comisión. La Falla Mont de Pietat de Xirivella desarrolló una campaña para ayudar a las personas afectadas de cáncer y ha recaudado fondos para varias asociaciones. Y por último, la Falla Virgen del Olivar de Alaquàs creó un proyecto que pretende ayudar a la disminución de un 80% de muertes que se pueden evitar con la realización de un RCP (reanimación cardio-pulmonar).