La Falla Convento Jerusalén ha convocado un concurso de recogida de latas de bebida que, además de ser ecológico, es solidario porque dará dinero a la Casa Caridad.
El proyecto “Convento más verde”, iniciado por la Falla Convento Jerusalén-Matemático Marzal para hacer de las Fallas una fiesta más sostenible ecológicamente, pone en marcha un concurso de reciclado de latas de bebida que beneficiará económicamente a la Casa Caridad.
En efecto, para reducir los residuos generados durante la semana fallera, esta comisión incentivará el reciclaje de las latas de aluminio mediante un concurso para los falleros y falleras. Para ello se han instalado unos contenedores inteligentes que reconocen a quien las deposita y el tipo de lata que se desecha, gracias a la colaboración de la empresa GreenYng. El censo fallero se ha dividido en tres equipos: uno hasta los 20 años de edad, otro de 21 a 50 años, y otro de 51 años en adelante; de manera que competirán entre ellos para ver quién recicla más. Un cuarto equipo serán los visitantes, es decir, cualquier persona aunque no sea fallero o fallera puede tirar en las máquinas sus latas del 1 al 5 de septiembre, así como tapones de plástico.
Para saber el destino de dicho reciclaje, la empresa valenciana CMplastik mostrará en la carpa de la falla los productos que realiza con los materiales recogidos como son bancos públicos hechos de tapones de plástico o de paja de arroz.
Este concurso es una actividad más de “Convento más verde”, que empezó con la plantación de 500 árboles en el término municipal de Llíria, con el fin de compensar la huella de carbono provocada por la actividad de la comisión fallera.
El objetivo de este reciclaje es concienciar y luchar sobre dos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas (ODS 12, Producción y Consumo responsable, y ODS 13, Acción por el Clima), pero también aportar algo al beneficio del ODS 2, Hambre Cero. Para ello, el beneficio de la venta del material recuperado multiplicado por dos se donará a la Casa Caridad.