Estamos en época de que los políticos prometen y prometen, a ver si les creemos y les votamos, cosa que aprovecha el Gremio de Artistas Falleros de Valencia para pedirles que se acuerden de ellos (y si es posible, que hagan algo de verdad por la profesión).
Como si de una carta a los Reyes Magos se tratara, el Gremio Artesano de Artistas Falleros de Valencia ha preparado una lista de deseos dirigidos a los mandatarios del Ayuntamiento de Valencia y de la Generalitat Valenciana que surjan tras las elecciones. Las peticiones tienen el fin de mejorar la profesión de artista fallero, la cual está pasando actualmente por uno de sus peores momentos. En efecto, los cierres de talleres están a la orden del día, y la Ciudad del Artista Fallero, un polígono industrial creado para estos y estas profesionales, cada vez se ve más invadida por otras actividades ajenas a la creación de fallas.
En concreto, los artistas falleros de Valencia piden para su actividad económica la exención del impuesto de bienes inmuebles (IBI) en los talleres; subvenciones para contratos laborales fijos discontinuos y de fin de obra; así como también para la compra de maquinaria, vehículos y equipos informáticos; más eficiencia en los expedientes de legalización de actividad y de talleres; y prejubilaciones por enfermedades profesionales.
En cuanto a su producto, la falla, solicitan unas bases en el concurso de Junta Central Fallera con medidas por precios y secciones; incrementar las subvención al monumento fallero, pero controlando que su destino sea éste; que para contratar a un artista se pida los certificados de Seguridad Social y de la Agencia Tributaria (de estar al corriente, se entiende), y que se potencie del Documento de Calidad Artesana (DCA).
También piden medidas de promoción de la profesión, como que los artistas la divulguen en centros educativos, centros de mayores, asociaciones de amas de casa y en otros colectivos; y hacerles publicidad fuera de la Comunitat Valenciana y en el extranjero, destacando sus capacidades y trabajos no relacionados con las fallas.
Por último, sobre la Ciudad del Artista Fallero, se pide a los futuros gobernantes que la fomenten como centro turístico; que se destaque la nave “Els Tallers” como centro cultural para talleres, exposiciones y otras actividades; que se construya en los solares que aún existen naves en régimen de alquiler para dar continuidad a la zona como ciudad creativa y artesanal; y crear una zona de residuos y reciclaje en las cercanías de la misma.