Córdoba tendrá su falla y olé

Habrá una falla cordobesa en abril. La “culpable” será la Asociación Cultural Fallers pel Món, que se ha empeñado en poner el huevo (o más bien la falla) cada año en un sitio. Y como siempre, sin faltar detalle, para que vean bien por allá lo que es nuestra fiesta.

Maqueta de la falla que se plantará en Córdoba en 2016 (Fallers pel Món)

La cuarta falla de Fallers pel Món se plantará en la ciudad andaluza de Córdoba, según se supo ayer en el acto de presentación celebrado en Carcaixent. Será la segunda vez que visiten Andalucía después de su paso por Granada en 2014, y como en las anteriores ocasiones, además del monumento se celebrarán todos los actos típicos de una semana fallera, y se desplazarán hasta allá unas mil personas procedentes de diversos puntos de la provincia de Valencia.

El 2 de abril está previsto que empiece esta particular fiesta fallera cordobesa que durará dos días y contará con dos fallas, Crida, plantà y cremà, pasacalles, Nit del Foc, mascletà, verbenas, Ofrenda a la Virgen de los Desamparados, gastronomía valenciana y diversos actos culturales donde no faltarán las bandas de música y la indumentaria tradicional de Valencia. En cuanto a los monumentos, los realizará de nuevo el artista Álex Oliver, teniendo el grande como lema Encantant Córdoba, el cual estará basado en el origen árabe de esta ciudad.

En el acto de presentación se descubrió la maqueta de la falla grande y también tuvo lugar la proclamación de las representaciones de honor, que este año corresponden a María Cortés Vayá (representante de honor), Laura Albero Perpiñá (representante infantil), José Enrique Amores (presidente), y Álvaro Orts Morant (representante infantil).

Representantes de Fallers pel Món para la falla de Córdoba (2016)

Para 2016 se espera repetir el éxito de las anteriores experiencias falleros en Ávila (2013), Granada (2014) y Toledo (2015), con la idea de que se produzca de nuevo un hermanamiento y fusión de culturas, según ha declarado José Enrique Amores, presidente de Fallers pel Món. En cualquier caso, supone una iniciativa que promociona las Fallas fuera de sus fronteras de una manera muy positiva, al permitir conocerlas de primera mano e incluso vivirlas a personas que viven lejos de ellas.