Se murió de nuevo Tirant lo Blanc en el casal de Na Jordana, aunque despertará (no como zombi, sino releyendo sus aventuras) el año que viene. “Tirant de Lletra” se clausuró hoy, Día de la Comunidad Valenciana, con la lectura de los dos últimos capítulos de la obra medieval y unas palabras del presidente de la comisión, Pere Borrego.
La foto de familia con falleros vestidos a la moda medieval (este año realizada en el antiguo Convento de Santo Domingo, ahora Capitanía), la lectura de los dos últimos capítulos de la versión dramatizada del Tirant lo Blanc, y un pequeño discurso del presidente de la comisión fallera pusieron punto y final a la decimotercera edición de la cita cultural “Tirant de Lletra”. Atrás han quedado actividades que desde el 5 de octubre ha desarrollado la Falla Na Jordana, como el taller de dibujo infantil dedicado a ese libro medieval, el monólogo de Eugeni Alemany, la exposición dedicada a Vicent Andrés Estellés (con un rinconcito para el artista fallero Ricardo Rubert, del cual fue homenaje la falla que plantaron el año pasado) y sobre todo las horas de lectura dedicadas a recordar la obra cumbre de la literatura valenciana con motivo del 9 de octubre, Día de la Comunidad Valenciana.
Una vez finalizada la lectura hoy (sesión en la que participó el culpable de esta web, Candreu), el presidente de la comisión, Pere Borrego, en un breve discurso de clausura, expresó su alegría por la longevidad de este evento que algunos auguraban efímero, así como su deseo de que haya futuras ediciones a pesar de que pudieran existir dificultades económicas, de recursos humanos, de apoyo institucional o de cualquier otra índole. Una foto de familia sobre el escenario y una comida para los falleros finalizaron esta edición de “Tirant de Lletra”.
